Cómo preparar un biberón paso a paso

Si habéis optado por la lactancia mixta o la lactancia artificial para alimentar a vuestro bebé, entonces vais a necesitar algunos consejos para navegar las cambiantes aguas del mundo de los biberones.

Una de las habilidades más importantes que tendréis que adquirir es saber cómo preparar un biberón para recién nacido para no desperdiciar ni una gota de leche y para que, tanto vuestro bebé como vosotros, disfrutéis al máximo de la experiencia de alimentar al bebé.

¿Cómo debe ser el biberón?

Vamos a empezar por el principio de los tiempos: ¿Qué características debe tener un biberón? Existen muchos tipos de biberones entre los que puedes elegir, pero algunas de las características más básicas que debe cumplir el biberón de tu peque son:

– Que sea práctico y funcional. Las diferentes partes del biberón deben permitirte utilizarlo de forma cómoda y sencilla y, por supuesto, funcionar correctamente.

– Que sea apropiado para la edad del niño. Los mejores biberones para bebés están diseñados para adecuarse a su edad, al tamaño de su boca y a la fuerza de sus manos.

– Que resulte fácil la esterilización.

– Que sea lo más liso posible, para que no tenga puntos difíciles en los que puedan quedar restos de leche sin limpiar.

– Utilizar un biberón de cristal o plástico, resistente a las altas temperaturas e irrompible.

Preparar su biberón, paso a paso

Una vez que ya sabes cuántos biberones comprar a un recién nacido y de qué tipo los necesitas, llega el momento de aprender cómo hacer un biberón paso a paso. Esto es muy importante no solo para garantizar que tu bebé recibe todos los nutrientes necesarios, sino también para optimizar las cantidades que empleas y no desperdiciar ningún biberón y para asegurar que no le das a tu peque nada que pueda ser dañino. 

Si optáis por la lactancia diferida, entonces no será necesario preparar la leche de fórmula porque el bebé tomará la leche materna que haya extraído la mamá previamente con un sacaleches. Pero si recurrís a la leche artificial, no debéis preocuparos. Preparar un biberón de leche de fórmula para el pequeño no es nada difícil. Lo importante es respetar algunas reglas y adquirir un poco de práctica de hacer biberones.

Veamos cómo preparar un biberón paso a paso:

– Cuando el biberón esté esterilizado, cogemos su base con la mano. Si todavía está muy caliente, utilicemos una pinza apropiada. Para empezar, debemos echar en el biberón la cantidad de agua necesaria. El agua para biberones puede ser embotellada o de grifo, pero la del grifo conviene hervirla previamente. 

– Después, hay que añadir el número exacto de medidas de leche en polvo que se indica en el paquete, en función del agua. Esto puede variar ligeramente de fabricante a fabricante y deberás tener en cuenta la edad de tu bebé para saber las cantidades de biberón aproximadas que es capaz de tomar.

– Nivelemos con un rasero o cuchillo el borde de la cucharita, para eliminar la leche en polvo sobrante. Siempre debemos respetar la proporción aconsejada entre polvo y agua. Si añadimos al biberón demasiada leche en polvo, la leche de fórmula obtenida estará muy concentrada y contendrá una cantidad excesiva de proteínas, grasas y minerales. En consecuencia, el niño tendrá más sed y llorará para que le den de beber.

– Disolvemos la leche en polvo en el agua y agitamos el biberón, pero ¿Cómo agitar un biberón? tienes que agitar el biberón con cuidado evitando sacudirlo, ya que esto produciría espuma en la leche de fórmula. Si te preguntas por qué la leche de fórmula hace espuma es muy sencillo, al agitar el biberón con leche de fórmula de manera enérgica los polvos y el agua se mezclan con el aire generando esta espuma en la leche de fórmula que puede llegar a generar cólicos del lactante.

– Antes de dar el biberón al pequeño, debemos comprobar la temperatura de la leche, echándonos unas gotas en el dorso de la mano.

Ya está. En estos cinco sencillos pasos, el biberón está listo para que se lo ofrezcáis a vuestro bebé.

¿Cómo hay que darle el biberón?

Cuando la mamá esté finalizando el tercer trimestre de embarazo, seguramente tendréis a vuestra disposición personas expertas que os explicarán las mejores formas de amamantar o darle el biberón a vuestro bebé. No obstante, vamos a daros algunos consejos básicos:

– Hay que sostener la cabecita del bebé con uno de los brazos (dependiendo de si se es diestro o zurdo). Con la otra mano, sujetar el biberón y, para estimular el reflejo de succión, es necesario rozar la mejilla del niño con un dedo o con la tetina. El pequeño abrirá la boca, buscando, momento en el que se le debe acercar la tetina a los labios para que empiece a comer.

– La persona que le dé el biberón debe sentarse con la espalda recta, sentirse cómoda, y colocar al pequeño en una posición en la que se encuentre a gusto, de manera que se apoye sobre el cuerpo y un brazo de la persona que le alimenta.

– Como alternativa, la persona que le dé el biberón se puede sentar en una silla, con los pies sobre un taburete o sobre la cama, con la espalda contra el respaldo. Hay que coger al niño de manera que su cabeza descanse sobre las rodillas flexionadas de la persona que le dé el biberón, con los pies apoyados en el estómago del adulto. Se le debe rodear la cabeza con una mano y sostener el biberón con la otra.

– Mientras el niño succiona, se le debe hablar cariñosamente y mimarle, lo cual le tranquilizará, si está tenso, y le estimulará, si es perezoso.

 ¿Cuáles son las normas de higiene básicas?

La higiene es fundamental cuando se da el biberón al niño. Por ello, saber cómo limpiar los biberones y las tetinas es crucial. Hay que ser escrupuloso y constante y debe utilizarse un detergente para biberones y tetinas especiales. También es necesario tener controlado cuándo cambiar la tetina del biberón. Además, siempre debemos lavarnos muy bien las manos antes y después de hacer biberones.

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Hasta el tercer mes del bebé, es necesario esterilizar biberones, tetinas, chupetes, cucharillas, juguetes de plástico y, en general, todo lo que el bebé se lleve a la boca, ya que antes de esa edad sus defensas inmunitarias no están completamente desarrolladas y podría contraer infecciones intestinales.

Si no sabes cómo se usa el esterilizador de biberones, no te preocupes porque es muy sencillo. 

Existen dos métodos de esterilización que requieren diferentes esterilizadores: por calor o con agua fría, mediante la acción de sustancias químicas antibacterianas.

Para esterilizar por calor puedes emplear la ebullición o el vapor. La ebullición consiste en colocar los objetos a esterilizar en la cesta del esterilizador, sumergirlos por completo en agua, hervir el agua durante 15-20 minutos y mantener los objetos en la olla con la tapa puesta hasta el momento de utilizarlos.

Por su parte, la esterilización al vapor requiere un esterilizador eléctrico para transformar el agua en vapor, colocar los objetos en una cesta y verter el agua en el recipiente. A continuación, cerrar herméticamente la tapa del recipiente y accionar el aparato. Al cabo de 15 minutos, la salida del vapor indicará que se ha producido la esterilización.

También puedes esterilizar los biberones, chupetes y tetinas con un esterilizador de microondas. Sólo se necesita un recipiente especial para microondas provisto de tapa, en el que se colocarán los biberones y las tetinas con un poco de agua, y se calentará durante 4-8 minutos. Este tipo de esterilización dura 3 horas.

Esperamos que estos consejos te hayan resultado útiles y que ahora tengas un poco más claro cómo hacer un biberón delicioso y nutritivo para tu bebé. Recuerda que en nuestra web tenemos una amplia gama de biberones de gran calidad para tu bebé cómo el Set de biberones con chupete Infinity Love Rosa o el Set de biberones con chupete Little Star Azul.