Diarreas en niños y bebés, ¿qué debemos saber?
El inicio de la escuela infantil puede favorecer la aparición de las temidas diarreas. La consecuencia más inmediata y peligrosa, según la edad del chiquitín, es la deshidratación.
Si tu bebé es menor de un año y sus deposiciones han aumentado, se han vuelto muy líquidas, llora sin consuelo o ha perdido el apetito, acude a tu pediatra pues puede que la diarrea se deba a algún alimento.
A partir del año, donde la alimentación ya suele está establecida los síntomas más habituales de una diarrea son:
- Aumento de deposiciones, siendo estas líquidas y abundantes.
- Dolor abdominal o retortijones.
- Pérdida del apetito.
- Puede ir acompañada de vómitos.
- Puede aparecer fiebre.
¿Qué debemos hacer?
- Si tu bebé toma leche materna no debes suspender la lactancia, sino ofrecer a demanda para evitar la deshidratación.
- En otros casos es importante administrar líquidos cada poco tiempo o sueros específicos para su edad.
- Ofrece una dieta blanda y suave sin forzar. Es importante que el niño coma lo que le apetezca en pequeñas cantidades.
¿Cuándo consultar con el pediatra?
- Si la diarrea persiste varios días.
- Si tu bebé se muestra apático.
- Si aparecen vómitos y no logra retener alimento.
- Si muestra signos de deshidratación o ves que no logra retener líquido.
- Si llora desconsoladamente por posibles dolores abdominales.
- Si en el pañal encuentras mucosidad o incluso sangre.
Ante cualquier duda acudid a vuestro pediatra quien os dará las pautas más adecuadas a seguir.
No te pierdas a Lucía Galán, pediatra, y sus consejos para el inicio de la guardería o escuela infantil
Publicado el 21 Oct, 2015