Gastrosquisis fetal, todo lo que necesitas saber

Durante el embarazo, lo que más preocupa a las futuras mamás y papás es que el bebé esté en perfecto estado de salud y se desarrolle correctamente, ya que hay un gran número de trastornos, enfermedades y complicaciones que pueden surgir. Al fin y al cabo, se está formando un ser humano completo y hay muchos factores que comprobar.

La gastrosquisis fetal es una de esas afecciones que pueden aparecer en un futuro bebé y que suponen una complicación a la que hay que prestar mucha atención.

Te contamos todo lo que es necesario conocer acerca de la gastrosquisis fetal, cuáles son las causas y cómo se puede tratar.

¿Qué es la gastrosquisis fetal?

Se conoce como gastrosquisis fetal a un defecto o malformación en la pared abdominal, cerca de donde estará el ombligo, que aparece durante el primer trimestre de embarazo. El resultado de esta malformación es un agujero de tamaño variable por el que se escapan los intestinos y, en ocasiones, el hígado o incluso el estómago.

Además del evidente problema de que el intestino no esté contenido en el interior del cuerpo, esto genera otras complicaciones, como que este órgano se hinche, acorte o retuerza, debido a la constante exposición al líquido amniótico.

¿Cuándo nace un bebé con gastrosquisis?

Las causas de las gastrosquisis fetal no están claras. Muchos casos se deben a factores genéticos y cambios en los cromosomas. Aunque también se considera que hay factores ambientales y comportamientos de la madre que pueden aumentar las posibilidades de sufrir esta complicación.

Si estás embarazada y eres fumadora, debes saber que el tabaco es uno de estos factores que facilitan la malformación de la pared abdominal en tu bebé. Lo mismo sucede si tomas drogas durante tu embarazo, a lo que se añaden las probabilidades de sufrir el síndrome de abstinencia neonatal.

Otro grupo de riesgo son las madres adolescentes, con mayor predominancia de las adolescentes caucásicas.

Algunos medicamentos o exposición a sustancias tóxicas en el ambiente o en los alimentos y bebidas que ingiera la madre pueden suponer un riesgo de desarrollar gastrosquisis fetal.

¿Cómo se detecta la gastrosquisis?

Ya sabes que se realizan muchas pruebas durante el embarazo con las que el médico puede determinar la salud general de tu bebé y aconsejarte en función de cómo se vaya desarrollando el embarazo por trimestre.

Sin embargo, te alegrará saber que la gastrosquisis fetal se puede detectar rápidamente con una simple ecografía durante el embarazo.

Por este motivo, es muy importante que no te saltes ninguna de tus citas con el ginecólogo y que acudas a ellas puntualmente, sin retrasarlas. Cuánto antes se detectan estos problemas, más probabilidades hay de poder tratarlos.

Si no haces un seguimiento periódico y no tienes ecografías regulares, descubrirás que tu bebé tiene gastrosquisis fetal en el momento del nacimiento, puesto que es un trastorno evidente a la vista.

¿Cómo se alimenta un bebé con gastrosquisis?

Si tu bebé nace con gastrosquisis, será necesario ponerle una vía intravenosa para que pueda recibir el alimento necesario. La lactancia materna quedará descartada hasta que se hayan podido reintroducir los órganos que sobresalen y reparar el daño en la abdomen. Los órganos que se encuentran fuera del cuerpo estarán inflamados y, por lo tanto, no son capaces de absorber y procesar los nutrientes recibidos de forma natural.

¿Cómo se trata la gastrosquisis fetal?

Esta patología se trata con una cirugía del abdomen tras el nacimiento del bebé. Esta cirugía es más o menos complicada dependiendo del tamaño del agujero en la pared abdominal. Cuantos más órganos haya que recolocar y más grande sea el agujero a reparar, más tiempo tarda la operación en completarse, puesto que puede ser necesario llevarla a cabo por fases.

Aunque la gastrosquisis fetal es grave, si se detecta a tiempo y se hace un seguimiento adecuado del embarazo, el 90% de los bebés que nacen vivos con esta deformación, logran sobrevivir. Suele ser necesario un parto programado para garantizar que las condiciones del parto sean las ideales y aumentar así las posibilidades de supervivencia. Las ecografías Doppler son muy útiles para determinar el estado del bebé.

¿Cuáles son las complicaciones de la gastrosquisis fetal?

Hay que tener en cuenta, no obstante, que la gastrosquisis fetal puede tener algunas complicaciones incluso cuando se hace el seguimiento apropiado:

• Muerte fetal intrauterina: El futuro bebé podría no sobrevivir y no llegar a término.
• Restricción del crecimiento: El bebé no se desarrolla y crece dentro de los parámetros, generalmente debido a que los nutrientes no se absorben bien.
• Parto prematuro: La deformación puede desencadenar un parto prematuro en una semana en la que el pequeño aún no esté listo para sobrevivir por sí solo o superar la cirugía.
• Intestino dilatado: Esto puede causar complicaciones posteriores incluso si se logra reparar el daño con una cirugía tras el parto.

La gastrosquisis fetal no es un trastorno común, así que no debe preocuparte en exceso si no te encuentras en ningún grupo de riesgo y llevas una alimentación adecuada y unos hábitos saludables durante tu embarazo.

 

Fuentes:

Gastrosquisis fetal: diagnóstico prenatal precoz y tratamiento – Top Doctors

Información sobre la gastrosquisis – CDC