Maternidad y trabajo: ¿rendimos más cuando nos convertimos en madres?

Si eres mujer y estás buscando trabajo puede que en alguna de las entrevistas de trabajo te hagan una incómoda pregunta: ¿Eres madre? O bien ¿tienes pensado tener hijos? Es obvio que quien lo pregunta piensa que la maternidad es un lastre para el terreno laboral, algo absolutamente falso. No solamente no entorpece sino que podemos sacar grandes ventajas de ello.

Maternidad y trabajo: las virtudes

Atentos a las cinco virtudes que toda mujer gana cuando se convierte en madre:

1. Organización. Si antes eras organizada, cuando tengas hijos tendrás la capacidad de organizar a un ejército si te lo propones. Cuadrar horarios de médicos, guardería, colegio; el mayor con el pequeño, la revisión del gas o esa reunión inesperada del trabajo. Pero al final del día, todo cuadra. Gracias a tu gran capacidad de organización.
2. Efectividad. En tiempo récord podrás conseguir todos tus objetivos del día en la oficina, no te puedes permitir salir un minuto tarde. Se acabaron los cafés de media mañana, las llamadas de teléfono o cualquier cosa que te distraiga. Y si tienes jornada reducida, sea cual sea el tiempo que la hayas reducido, tu trabajo saldrá adelante igual que antes de ser madre. Esa efectividad seguirá al llegar a casa, reloj en mano hay que cumplir horarios: parque, cenas, baños, y todos a la cama con puntualidad alemana.
3. Concentración. Para hacer todo lo dicho en el punto dos, o te concentras o eres mujer/madre muerta. No vale que la noche haya sido para olvidar por culpa de unos mocos inoportunos o unos lloros a deshoras. A la hora de la verdad, café mediante, serás capaz de concentrarte para sacar todo adelante ese día.
4. Creatividad. La maternidad nos concede una creatividad sin límites. Te inventarás cuentos en el coche para que el peque no llore, crearás un menú semanal para que las cenas sean variadas y con todas esas cosas que los niños deben comer, y te las ingeniarás para proponer ideas a tu jefe a pesar de la ojera que luces ese día. Creatividad maternal al poder.
5. Y un súper poder que no falta a ninguna madre es el de hacer varias cosas a la vez, ¡somos multitarea! Madres capaces de estar haciendo un informe al ordenador al tiempo que dan el pecho; que hacen la cena, al tiempo que leen un cuento o incluso limpia los mocos al pequeño; madres que cierran el balance del mes en la oficina, mientras concreta la cita con el pediatra y ultima la lista de la compra que enviará a papá para que no se le olvide nada.

¡Así somos las madres! Es evidente que la maternidad es un punto a favor a la hora de trabajar, ¿no creéis? Y tú, cuéntanos, ¿qué virtud has desarrollado desde que tienes hijos? :).