Osteoporosis transitoria en el embarazo y lactancia

En un embarazo trimestre a trimestre se van sucediendo una enorme cantidad de rápidos cambios, muchos más que en cualquier otro proceso físico o momento de la vida. Por eso, en ocasiones, el cuerpo de una persona embarazada reacciona de formas extrañas, causando daños en lugar de reforzándolo.

Una de estas situaciones es cuando se produce la osteoporosis en el embarazo u osteoporosis transitoria, una patología de los huesos que puede llegar a ser preocupante.

Hoy, en Suavinex, te contamos todo sobre la osteoporosis y qué puedes hacer para reducir las posibilidades de sufrirla durante tu embarazo.

¿Qué es la osteoporosis transitoria?

La osteoporosis es una enfermedad que afecta a los huesos, reduciendo su densidad y causando debilidad y fracturas. En el caso de la osteoporosis transitoria, que también se conoce como síndrome de edema de médula ósea o síndrome SEMO, consiste en la disminución de la densidad de los huesos durante el tercer trimestre de embarazo, normalmente en la cadera aunque también puede darse en las piernas y rodillas. Esta disminución de la densidad, no obstante, es temporal y después del parto la madre puede notar poco a poco que la fuerza y resistencia habitual de sus huesos va recuperándose.

Aunque suena muy preocupante (¿y si se te rompe la cadera estando embarazada?) hay que tener en cuenta que solo se estiman 4 casos por cada millón de embarazos y que la fractura de los huesos es aún más rara.

¿Cuál es la causa de la osteoporosis en el embarazo?

La causa de esta afección no está clara pero sí se puede achacar a diversos factores que tienen lugar durante el embarazo, especialmente durante ese tercer trimestre:

• Los cambios que se producen en la circulación sanguínea.
• La dificultad para moverse y la reducción de la actividad física. Por ello hacer ejercicio embarazada puede ser muy beneficioso para ambos.
• Los nervios pélvicos y el nervio obturador pueden empezar a sufrir compresión.
• Las necesidades de alimentación y desarrollo del feto pueden desviar el calcio en el embarazo de la madre hacia el feto provocando esa reducción de la masa ósea.

Además de estos factores típicos de un embarazo avanzado, también pueden afectar negativamente el consumo de alcohol y si estas embarazada y eres fumadora.

¿Qué pasa si tienes osteoporosis y estás embarazada?

El principal síntoma de osteoporosis en el embarazo es sufrir dolor repentino, normalmente en una de las caderas aunque también puede afectar a las dos o a otras zonas del cuerpo, sin haber sufrido ningún golpe o traumatismo.

Si al intentar moverse el dolor empeora, hasta el punto de no poder andar y tener que permanecer en reposo, es muy probable que se trate de osteoporosis.

En casos graves podría darse la fractura de algún hueso sin más motivo que soportar el peso del cuerpo pero esto no es habitual.

Hay varias formas de confirmar un diagnóstico de osteoporosis en el embarazo, una de las más fiables es la resonancia magnética pero será el equipo médico el que decida si es necesaria.

¿Cómo se trata la osteoporosis transitoria?

No hay más tratamiento para esta afección que reposo, tomar un analgésico recetado por el ginecólogo, utilización de muletas y otras herramientas para cuando no es posible evitar el moverse y, en casos más graves, se puede recomendar la rehabilitación física y un parto por cesárea para eliminar el riesgo de que se puedan producir fracturas durante el parto.

Aproximadamente seis meses después de interrumpir la lactancia materna definitivamente, la osteoporosis se corrige por sí sola con el paso del tiempo y se recupera la masa ósea perdida.

¿Cómo evitar la osteoporosis en el embarazo?

Puesto que se trata de una afección que tiene más prevalencia en el tercer trimestre y durante la lactancia, se recomienda como método preventivo el controlar la ingesta de calcio de la madre, asegurándose de que es suficiente para compensar las necesidades del feto, pero teniendo también en cuenta que el cuerpo de la mujer embarazada absorbe mejor el calcio tanto de los alimentos como de los suplementos.

Hacer ejercicio en el primer trimestre de embarazo y en el segundo trimestre de embarazo también ayudará a fortalecer los huesos de cara al final de la gestación.

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La osteoporosis en el embarazo es rara y los casos extremos más aún pero prevenir mediante una dieta equilibrada y algo de ejercicio apto para embarazadas reducirá tus posibilidades de sufrirla.

Fuentes:

¡Mantén los huesos fuertes! – NACE

Osteoporosis transitoria de cadera y gestación – Elsevier

Osteoporosis transitoria del embarazo – Quirón Salud