Un mundo mejor es posible si los padres se implican en el cuidado de los hijos

Cuando faltaban tres semanas para volver de la baja de maternidad, me invitaron a irme de la empresa en la que trabajaba. Entonces lancé un ebook que recogía el testimonio de 28 mujeres directivas. Fue trending topic nada más lanzarlo. Consiguió 700 descargas en un solo día y despertó el interés de los medios de comunicación. Ese fue el origen del movimiento #mamiconcilia.  Tras dos años y medio de campaña, ha conseguido que la conciliación esté en boca de todos. Sin embargo, no tardaron en aparecer las voces críticas: ¿Por qué #mamiconcilia? ¿Para cuándo #papiconcilia? En aquel momento pensaba que la conciliación solo nos afectaba a las mujeres y, más concretamente, a las madres. A fin de cuentas mi marido había tenido el mismo hijo que yo. Pero él seguía trabajando sin problemas. Pero ¿qué pasaba con el cuidado de nuestro hijo? Él quería implicarse igual que yo y no podía. Los padres no podían.

Entre un 61 y un 77 por ciento de los padres a nivel mundial dicen que les gustaría trabajar menos si eso significara que pueden pasar más tiempo con sus hijos. Eso incida el estudio State of the world’s fathers, publicado en junio de 2015.

El permiso de paternidad en España

El permiso de paternidad en España es de 13 días naturales ininterrumpidos. Frente a 6 semanas obligatorias para la recuperación para la madre. Las 10 semanas restantes hasta las famosas 16 de las que habitualmente disfruta la madre son transferibles al padre. Pero la realidad es que casi siempre las coge ella.

Sólo un 2% de las mujeres transfiere parte de la baja de maternidad al padre. El principal motivo es el tradicional reparto de roles que asigna a las mujeres las tareas relacionadas con los cuidados y al hombre el trabajo fuera de casa. Cuando la mujer se incorporó al mundo laboral el hombre no lo hizo de igual forma al trabajo doméstico, asumiendo así la mujer un doble rol. Si a esto le sumamos la desigualdad existente todavía en el mercado, donde los hombres ocupan más cargos directivos y por regla general ellas cobran menos, suele ser la mujer quien renuncia a la vida laboral, coge las 10 semanas trasferibles, pide la reducción de jornada, una excedencia o cualquier otra cosa que tenga que ver con el cuidado de los hijos.

La PPiiNA

La PPiiNA, Plataforma por los permisos iguales e intransferibles (y pagados al 100%) de nacimiento y adopción, reivindica desde 2005 que los dos progenitores tengan igualdad de derechos para el cuidado de los hijos. Propone que exista un permiso parental inicial obligatorio para ambos de dos semanas de duración y luego un permiso parental para la crianza de 14 semanas más para cada uno, voluntario e intransferible, a disfrutar durante los 12 primeros meses del bebé. Si ambos progenitores disfrutaran de su derecho, garantizarían que el bebé sería cuidado por alguno de sus progenitores durante ocho meses en su primer año de vida. Esta reforma legislativa naturalizaría los cuidados por parte de los hombres. El primer paso está dado. El pasado 18 de octubre la propuesta de la PPiiNA fue presentada en el Congreso. 173 personas votaron a favor, 2 en contra y 164 se abstuvieron. En consecuencia, el Congreso instó al Gobierno en funciones a establecer un calendario que permita igualar los permisos.

El movimiento #papiconcilia

Mientras tanto, desde el movimiento #papiconcilia creemos que dando visibilidad a padres que se implican de forma corresponsable en el cuidado de los hijos podemos contribuir a un verdadero cambio social. Si quieres sumarte a nuestro movimiento, comparte tu testimonio en nuestra web. Contamos con más de 70 voces masculinas, incluidas las de 12 directivos de 7 importantes compañías. Su ejemplo es importante porque desde su situación de poder dentro de la empresa pueden trasformar la compañía.

Qué aporta la paternidad a la empresa

Con la ayuda de estos 12 directivos elaboramos un listado de más de 20 cualidades que la paternidad aporta a la empresa como una mejor organización y gestión del tiempo, mayor sensibilidad, cercanía y empatía, escucha activa, prudencia, paciencia, flexibilidad, sentido del humor…

Además son indiscutibles, y cada vez hay más estudios que lo demuestran, los efectos positivos de la implicación del padre en la familia, la salud prenatal de la madre y el desarrollo psicológico, cognitivo y escolar de los hijos e hijas. Según el estudio State of the world’s fathers, citado anteriormente, la interacción con el padre es muy importante para el desarrollo de la empatía y las habilidades sociales de hijos e hijas.

Los niños que nacen y crecen en un entorno igualitario tenderán a repetir este modelo cuando sean mayores. Un mundo mejor es posible si los padres se implican en el cuidado de los hijos.

Usúe Madinaveitia

Creadora de los movimientos #mamiconcilia y #papiconcilia