Pirámide saludable de la alimentación en la primera infancia

Médicos y nutricionistas coinciden en la importancia de una alimentación saludable desde la primera infancia para evitar, entre otras cosas, la obesidad infantil, una de las grandes lacras de la sociedad occidental. Para ello se sirven de las conocidas pirámides de alimentación, una guía para tener claro cuáles son los productos que se recomiendan consumir diariamente y cuáles deben ser tomados esporádicamente. Es importante tener claro cuál es la pirámide saludable de la alimentación. 

Alimentación y ejercicio

Una alimentación saludable debe estar siempre acompañado por un consumo abundante de agua. Hay que evitar la toma de zumos, refrescos u otras bebidas azucaradas. Además, es fundamental la práctica de ejercicio. Desde bebés debemos acostumbrar a nuestros hijos a salir al parque, al campo e incitarles al juego con otros niños. Tras sus primeros pasos estas prácticas al aire libre serán la mejor manera de que hagan ejercicio, al tiempo que les estimulamos y se divierten.

Pirámide saludable de la alimentación

Para comprender mejor la pirámide saludable de la alimentación, a modo de resumen, debemos tener claro lo siguiente:

• Se deben realizar cinco comidas al día.
• El desayuno es una comida muy importante para todos, especialmente para los niños. Debemos asegurarnos que tengan un buen aporte de nutrientes para enfrentar el día.
• Frutas, verduras y cereales deben consumirse a diario. Más allá de pensar en el número de raciones diarias, hay que establecer este hábito en la alimentación de nuestros hijos. Los zumos envasados no sustituyen en ningún caso una pieza de fruta. Los zumos naturales pierden parte de la fibra que ofrece la fruta entera. Los cereales mucho mejor si son integrales.
• Incrementar el consumo de pescado frente al de carne, pues tendemos a lo contrario. Debemos favorecer el consumo de carne blanca y reducir la toma de embutidos.
• Legumbres o frutos secos, deben formar parte de la dieta semanal de cualquier familia. Se recomienda su consumo de dos a cuatro veces por semana.
• Los lácteos deben estar muy presentes de forma diaria. Pueden ser consumidos en sus diferentes modalidades: leche, yogures, quesos. Estos últimos procurando que no sean grasos.
• Modera el uso de la sal y procura que ésta sea yodada.
• Los dulces y bollería deben ser tomados de forma ocasional, no debemos incluir en meriendas y desayunos un dulce como norma.
• Opta por el aceite de oliva tanto para cocinar como para su consumo crudo.

Estas sencillas pautas nos servirán para mejorar la alimentación familiar. Y, en consecuencia, para iniciar a nuestros hijos en unas prácticas alimentarias saludables. Para ayudarte en este propósito te invitamos a visitar nuestro espacio Cocina con Suavinex. En él hallarás valiosa información para alimentar a tu bebé en las distintas etapas de su desarrollo.