¿Qué es la hipoxia fetal? Causas y principales síntomas
El embarazo es una etapa muy bonita, aunque también son unos meses donde los padres muestran mayor preocupación por la salud del bebé y porque todo salga bien en el parto – —ya sea parto natural o cesárea—-. Pueden darse diferentes complicaciones durante el embarazo —y también complicaciones en el postparto—, una de ellas es la falta de oxígeno del bebé. Se denomina con el término de hipoxia fetal, puede que no te suene, por eso hoy en Suavinex queremos mostrarte todo lo que debes saber sobre este suceso.
Vamos a comenzar mostrándote de qué se trata exactamente la hipoxia fetal, cuáles son sus principales síntomas, así como las causas que provocan esta falta de oxígeno. Terminando por conocer algunas de las consecuencias que provoca la hipoxia fetal.
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¿Qué es la hipoxia fetal?
Cuando hablamos de hipoxia fetal nos referimos a la falta de oxígeno en los tejidos antes, durante y después del parto. Ya sabrás que el oxígeno es esencial para las funciones vitales del feto, y por lo tanto su disminución puede provocar una reducción del metabolismo de la glucosa. Este elemento hace que las células produzcan energía, y si no recibe la glucosa suficiente la célula acaba muriendo.
Se trata de una etapa temprana de asfixia al nacer el feto, y cuando ocurre la hipoxia fetal, el bebé empieza a generar energía sin tener oxígeno, llamado metabolismo anaeróbico. Este proceso provoca que el ácido láctico se acumule en la sangre del bebé. El alto nivel de dióxido de carbono junto con la acumulación de este ácido hace que el bebé tenga acidosis. Y la acidosis y la hipoxia pueden causar una disminución de la función cardíaca. Finalmente, esto puede provocar que tu bebé experimente una presión arterial muy baja, así como una reducción del flujo sanguíneo al cerebro.
La hipoxia fetal extrínseca es una de las causas de muerte fetal, e incluye asfixia aguda definida como la interrupción brusca en el intercambio gaseoso materno fetal.
Hipoxia fetal: signos y síntomas
Se considera normal una frecuencia entre 120-160 latidos por minuto; la bradicardia inferior a 100 l/m, mantenida, es un signo de hipoxia fetal.
Causas de la hipoxia fetal
Una vez ya conoces qué es la hipoxia fetal y cuáles son sus principales síntomas, vamos a profundizar entre las situaciones que comprometen que el oxígeno llegue al flujo sanguíneo de tu bebé:
- Las enfermedades cardiopulmonares maternas o la anemia en el embarazo pueden ser una de las causas.
- Sí el desprendimiento de la placenta es prematuro o existe insuficiencia placentaria también puede provocar la falta de oxígeno en el feto.
- Hipotensión materna o anomalías en la contracción uterina. Gracias a la ecografía Doppler, y otros métodos de control, podemos detectar las diferentes anomalías, una de las causas de la hipoxia fetal.
- En el caso de que el cordón umbilical esté comprimido.
- Cuando el feto presenta una serie de problemas: anemia fetal y anomalías cardíacas, como las arritmias.
- Si se trata de un parto prematuro o el tamaño del bebé es pequeño, pudiendo sufrir microcefalia.
- E incluso cuando el trabajo que desempeña la madre en el parto es muy largo, con esfuerzos demasiado seguidos, sin darle tiempo a recuperarse.
Consecuencias de la hipoxia fetal
La falta de oxígeno en el feto puede ocasionar diferentes riesgos en él, ten en cuenta que afecta tanto a los órganos como al sistema renal, respiratorio, digestivo, metabólico, cardiovascular y cerebral del bebé. No obstante, será tan dañino como el nivel de alteración que sufra la entrega de oxígeno a los tejidos. Esto quiere decir que, todo dependerá del tiempo y de la cantidad de oxígeno que ha dejado de recibir el feto, haciendo que las consecuencias sean más o menos leves.
En el caso de que el oxígeno que el bebé haya dejado de recibir sea una cantidad reducida y haya sido durante poco tiempo, no te alarmes, porque las secuelas serán muy leves. Únicamente tendrá algunas consecuencias en su organismo, pero tranquila porque serán transitorias y reversibles.
Ahora bien, si con la hipoxia fetal el feto se ha privado de oxígeno durante un tiempo más prolongado, de unos 5 y 15 minutos, sí que provocará algunos efectos negativos. En estos casos tu bebé puede sufrir consecuencias más importantes a nivel neurológico, pudiendo llegar a experimentar convulsiones y parálisis cerebral. Estamos hablando de un feto el cual aún se está desarrollando dentro de tu útero, y especialmente la parte del cerebro es una de las más vulnerables, por ello las secuelas pueden llegar a ser irreversibles.
Cuando tu bebé sufre una reducción en el suministro de oxígeno junto con una disminución del flujo sanguíneo hablamos del trastorno de encefalopatía hipóxica-isquémica (EHI). Y normalmente los signos de esta alteración son los siguientes:
- Problemas respiratorios.
- Dificultades en la alimentación. Puede que llegue a experimentar dificultad a la hora de tragar o chupar.
- Reflejos deprimidos. Existe una respuesta anormal a la luz.
- Tono muscular bajo o alto.
- Convulsiones. Suele ser uno de los síntomas más comunes, y en los recién nacidos se experimentan tras las primeras 24 y 48 horas después del parto.
En cualquier caso, lo oportuno es que acudas a tu médico para consultarle cualquier duda al respecto. Serán los profesionales sanitarios quienes se encarguen de darte el diagnóstico correcto y las indicaciones necesarias tras realizarte las pruebas ordinarias. No te preocupes, porque gracias a las ecografías en el embarazo tu médico lleva un control y seguimiento del mismo, para garantizar la salud de tu pequeño y la tuya.
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¿Conocías qué era la hipoxia fetal y cuáles eran sus principales causas y síntomas?
Fuentes
Cuando el bebé sufre falta de oxígeno en el momento del parto: causas, consecuencias y soluciones – Bebés y más
Hipoxia perinatal/ asfixia del nacimiento – Infogen