Afrontar la vuelta al cole desde la corresponsabilidad

La vuelta al cole ya está aquí. Aunque puede que no se trate de una vuelta propiamente dicha, sino un estreno… ¡el estreno! El inicio de la escuela infantil, o la llegada al colegio, trae no pocos miedos y dudas a madres y padres. Por muy buenas referencias que tengamos de las instituciones, lo desconocido produce ese no se qué que pone en guardia. Conscientes de esta realidad, muchos centros ofrecen horarios de adaptación durante los primeros días, o incluso semanas, para que la transición sea más llevadera. Llevadera para niños y niñas, porque hay que hacer malabares para poder llevarlos, recogerlos y estar con ellos durante el resto del día. Una oportunidad estupenda para hacer un ejercicio de corresponsabilidad.

El periodo de adaptación

El periodo de adaptación es diferente en cada escuela. En las más respetuosas, conscientes de que esa necesidad la tienen  todos los miembros de la familia, incluso se permite que los progenitores pasen al aula y compartan allí tiempo con sus hijos e hijas. Algo complicado de ejecutar si sus empresas no tienen implementadas políticas de conciliación y mantienen el modelo en el que prevalece el presentismo. Durante este período de adaptación lo habitual es que el horario sea breve y diferente cada día. Así será un proceso muy gradual, algo importante en el caso de los bebés o de los niños que comienzan en el cole de mayores.

La corresponsabilidad y reparto al 50% de la crianza de los hijos y las tareas del hogar son temas centrales para el tejido social. Aunque poco a poco se van dando pasos en este sentido, sigue siendo necesario que los gobiernos tomen medidas para facilitarlos. Y que vayan más allá de alargar los permisos paternales, porque la crianza continúa tras ellos. También tras las merecidas vacaciones familiares. ¿Qué hacemos a la hora de enfrentarnos a la vuelta al cole?

La vuelta al cole desde la corresponsabilidad

La vuelta al cole es un momento ideal para ejercer la corresponsabilidad. Aunque, por normal general, sea algo que recae solo sobre uno de los progenitores, cada vez hay más parejas conscientes de que entre dos la carga se lleva mejor. Estas son algunas de esas cargas:

• Preparar todo lo necesario. Comprar la bata y bolsitas personalizadas, para no tener que marcar nada, revisar la ropa que sirve y la que hay que cambiar. Una carga que parece sencilla, pero que puede llegar a ser pesada.
• Coordinar los horarios para poder asistir a las reuniones previas.
• Guardar algunos días de vacaciones para hacer la adaptación de forma más tranquila.
• Ser un equipo, siempre. También en los días previos para reorganizar las rutinas familiares. Lo mismo aplica en los posteriores.

Olvida tus miedos, coge de la mano a tu pareja, y adelante, en realidad la vuelta al cole es más asumible desde la consciencia. Y si has decidido afrontar la maternidad o paternidad en solitario, buscar ayuda en estos primeros días será fundamental.

¿Te da miedo afrontar la vuelta al cole? ¿Cómo la planteas?